3 Consejos para mejorar tu salud mental

Mejorar la salud mental siempre es posible. Se trata de buscar un estado de bienestar emocional, aquí te brindamos 3 consejos para mejorar tu salud mental en tiempos difíciles. Cada individuo debería ser capaz de hacer frente a las tensiones normales de la vida y trabajar productivamente. Todo esto afecta la forma en que pensamos, sentimos y actuamos.

También ayuda a determinar cómo manejamos el estrés, nos relacionamos con los demás y tomamos decisiones. Es fundamental mantener una buena salud mental, ya que puede tener un impacto directo en nuestra salud física, relaciones, desempeño en el trabajo y calidad de vida en general.

La mala salud mental puede generar sentimientos de aislamiento, baja autoestima e incluso depresión o trastornos de ansiedad. Es importante cuidar nuestra salud mental para mantenernos sanos y felices en la vida. Necesitamos enfrentar lo que se presente en tiempos difíciles.

En este artículo, discutiremos algunos consejos para ayudar a mejorar tu salud mental. Veremos la importancia del cuidado personal, cómo cultivar relaciones saludables, los beneficios de practicar la gratitud y más. Siguiendo estos consejos, las personas pueden recuperar su salud y dar pasos hacia un mayor bienestar.  Uno  de los aspectos que contribuye a mejorar la salud mental es expresar gratitud regularmente y reflexionar sobre aquello por lo que estamos agradecidos. Podemos comenzar a cultivar una actitud positiva y contenta, ayudando así a elevar el estado de ánimo.

1. Es importante practicar la gratitud

La gratitud es un sentimiento de aprecio o agradecimiento por las cosas buenas que han sucedido en nuestras vidas. A menudo se dice que practicar la gratitud puede ayudar a mejorar nuestra salud mental, al reducir el estrés y la ansiedad y aumentar la felicidad en general.

La gratitud también es una poderosa práctica espiritual que ha existido durante siglos; implica reconocer y apreciar las cosas buenas de nuestra vida, por pequeñas que sean y que puede ayudarnos a conectarnos con nuestro ser interior y encontrar alegría en el momento presente. Al practicar la gratitud regularmente, podemos aprender a ser más conscientes de nuestras bendiciones y desarrollar un sentido más profundo de conexión con nosotros mismos y el mundo que nos rodea.

La práctica de la gratitud implica tomarse el tiempo para reflexionar sobre aquello por lo que estamos agradecidos, ya sea por las personas en nuestras vidas o por las experiencias que hemos tenido. También implica expresar nuestro agradecimiento a quienes nos rodean, dando las gracias a quienes nos han ayudado de alguna manera. Si lo hace, ayudará a fortalecer el vínculo entre usted y sus seres queridos, lo que facilitará que ambas partes se conecten a un nivel más profundo.

Practicar la gratitud puede ser una herramienta poderosa para aumentar la autoestima. Ayuda a cambiar nuestro enfoque lejos de nuestros problemas y hacia las cosas por las que estamos agradecidos. Esto puede ayudarnos también a poner nuestras preocupaciones en perspectiva. Además, reconocer que tenemos muchas cosas por las que estar agradecidos, a pesar de las situaciones difíciles.

La gratitud también crea sentimientos positivos y nos anima a tomar medidas para lograr nuestros objetivos. Puede ayudarnos a desarrollar la autoestima, aumentar la resiliencia y fomentar relaciones más sanas con nosotros mismos y con los demás.

2. Cultivar el autocuidado beneficia tu salud mental

El autocuidado es un término que se utiliza para describir las actividades que hacemos para cuidar nuestra salud física, mental y emocional. Es importante porque nos ayuda a sobrellevar el estrés, controlar nuestras emociones y mantener un estilo de vida saludable. El cuidado personal puede incluir dormir lo suficiente. Puede hacer ejercicio para relajarse y realizar actividades divertidas.

Es importante sacar tiempo de nuestra apretada agenda para concentrarnos en nosotros mismos y cultivar un estilo de vida saludable. Una forma de hacerlo es participando en actividades al aire libre. Esto nos brinda la oportunidad de conectarnos con la naturaleza, lo que puede tener un efecto calmante en la mente.

Considere participar en actividades al aire libre como caminar, andar en bicicleta, acampar o nadar. Estas actividades son físicamente beneficiosas y nos brindan una sensación de relajación y rejuvenecimiento.  Pueden ayudarnos a sentirnos con más energía y motivación en nuestra vida diaria y así mejorar nuestra salud mental.

El autocuidado también implica practicar un diálogo interno positivo o participar en actividades que traigan alegría a su vida. Tomarse el tiempo para concentrarse en usted mismo es esencial para su bienestar general, de esta manera estaremos nutriéndonos y cultivando la autoestima.

La autoestima es nuestro sentido interno de valor y se puede nutrir a través de actividades como la relajación. Otras recursos que se pueden utilizar son la atención plena,  hábitos alimenticios saludables, afirmaciones positivas y más. Cuidarnos nos ayuda a sentirnos mejor con nosotros mismos y nos da la energía que necesitamos para vivir la vida al máximo.

Lo positivo de las terapias

  • La terapia ocupacional también puede ser una forma efectiva de cultivar el cuidado personal. Ayuda a identificar cómo puede usar las actividades cotidianas para mejorar su bienestar general.
  • Hacer uso de la terapia ocupacional puede ayudar a las personas a ser más conscientes de sus pensamientos y sentimientos, lo que lleva a un mayor bienestar emocional.
  • A través de la terapia ocupacional, puedes aprender cómo hacer cambios en tu vida que te ayudarán a sentirte mejor física y emocionalmente. Estas terapias se enfocan en ayudar a las personas a desarrollar las habilidades que necesitan para participar en las actividades cotidianas, como el trabajo, las actividades de ocio y el cuidado personal.
  • A través de la terapia ocupacional, las personas pueden aprender cómo manejar mejor los factores estresantes en sus vidas, establecer límites saludables con los demás y encontrar formas de cuidarse tanto mental como físicamente.
  • Al incorporar la terapia ocupacional en su rutina de cuidado personal, puede crear un estilo de vida más saludable. Esto traerá beneficios que lo ayudará a prosperar en todas las áreas de su vida.
  • Los terapeutas ocupacionales pueden ayudar a los pacientes a identificar las cosas por las que están agradecidos y a expresar esa gratitud.

3. Beneficio de cultivar relaciones saludables

Las relaciones saludables son esenciales para nuestra felicidad y bienestar. Nos permiten sentirnos conectados con los demás y nos dan un sentido de pertenencia. Pero cultivar estas relaciones también puede tener numerosos beneficios que van más allá de sentirse bien.

Las  relaciones saludables pueden mejorar tu salud mental  y física e incluso ayudarnos a lograr un mayor éxito en nuestra vida profesional. Para cultivar relaciones saludables, primero debemos construir una base sólida de autoestima. La autoestima es un factor importante en el desarrollo de relaciones saludables porque nos ayuda a tener más confianza y seguridad. En consecuencia, nos permite ser más abiertos y honestos con los demás.

Es importante tener una imagen propia positiva y reconocer nuestras propias fortalezas y debilidades. Tener una visión positiva de nosotros mismos, nos ayuda a entablar relaciones significativas y construir conexiones sólidas con los demás. Con esta base de autoestima, podemos crear fuertes lazos con quienes nos rodean, lo que conducirá a relaciones más sanas.

La salud mental afecta cómo pensamos, sentimos,  actuamos y puede determinar cómo manejamos el estrés. Nos relacionamos con los demás y tomamos decisiones. Es fundamental para llevar una vida sana y alcanzar nuestros objetivos. Desafortunadamente, los problemas de salud mental a menudo se pasan por alto o no se toman lo suficientemente en serio. Es importante reconocer que tu salud mental es tan importante como tu salud física y debe recibir la misma atención y cuidado.

Debemos esforzarnos por crear un entorno en el que las personas puedan hablar abiertamente sobre su salud mental. De iagual modo, expresarse  sin temor a ser juzgadas o estigmatizadas. Al hacer esto, podemos ayudar a garantizar que todos tengan acceso al apoyo que necesitan para llevar una vida mentalmente saludable.

El crecimiento espiritual ayuda a mejorar tu salud mental

  • Las relaciones saludables son esenciales para nuestro bienestar general y crecimiento espiritual.  Esto nos permite estar presentes en el momento y apreciar la belleza de la vida.
  • Con la espiritualidad, podemos construir relaciones basadas en el respeto, la comprensión y el apoyo mutuos. Podemos aprender a apreciar la singularidad de cada individuo y ser más compasivos con ellos. Esta práctica contribuye notablemente a mejorar tu salud mental.
  • Al participar en prácticas espirituales como la meditación, podemos crear conexiones más profundas con nosotros mismos y con los demás. Finalmente, estas prácticas conducirán a relaciones más saludables y a mejorar tu salud mental.
  • Tener una práctica espiritual puede ayudarnos a reconocer la interconexión de todas las cosas. Esto nos permite desarrollar empatía y comprensión por los demás. Esta comprensión puede ayudarnos a construir relaciones sólidas con quienes nos rodean y fomentar un entorno de respeto y aprecio mutuos.

La salud mental es una parte importante de nuestro bienestar general y no debe pasarse por alto. Es fundamental tomar medidas para garantizar que estamos cuidando nuestra salud mental para poder llevar una vida feliz y saludable. Es fundamental que seamos conscientes de nuestra salud mental y tomemos medidas para asegurarnos de que nos estamos cuidando. Los problemas de salud mental pueden afectar a cualquier persona, independientemente de su edad, sexo o antecedentes.

 

 

 

6 Acciones para cuidar la salud mental de mis hijos

En este artículo, le brindamos 6 acciones para cuidar la salud mental de mis hijos.  Ser padres es una responsabilidad enorme y esto debe ser una prioridad. La salud mental es una parte importante del bienestar general de un niño. Es importante reconocer los signos y síntomas de estos problemas en ellos para que puedan tratarse a tiempo.

Es un tema que nos afecta a todos. Debemos estar seguros de que estamos tomando las medidas necesarias.  Es necesario proteger nuestro bienestar y el de quienes nos rodean. Como padres, debemos asegurar que nuestros hijos estén bien cuidados mental, emocional y físicamente. Establecer una relación de confianza y conexión con nuestros hijos es clave. Es un apoyo para que  desarrollen hábitos mentales saludables.

¿Por qué es importante cuidar la salud mental de mis hijos?

El cuidado de la salud mental es una parte esencial de la salud y el bienestar general de los hijos. Se trata de brindarles los recursos y todo el apoyo para hacer frente a la vida diaria y desarrollar hábitos saludables que durarán hasta la edad adulta. Con la atención de salud mental adecuada, los niños pueden crecer sintiéndose confiados, seguros y capaces de alcanzar su máximo potencial.

El cuidado de la salud mental ayuda a los niños a comprender lo que sienten, desarrollar resiliencia, manejar el estrés y tomar decisiones positivas. También les da habilidades para hacer frente a situaciones difíciles, como el acoso escolar o los conflictos familiares.

La atención de la salud mental de los niños puede implicar una variedad de aspectos como terapia, uso de medicinas o cambios en el estilo de vida, según las necesidades individuales del niño.

Los padres deben reconocer la importancia de cuidar de su propia salud mental. Así será más fácil apoyar a sus hijos en todo momento. Deben asegurar que ellos tengan acceso a recursos como libros, grupos de apoyo o ayuda profesional. Esto ayuda a promover la salud mental de los hijos  y contribuye a crear  buenas relaciones, así como crear confianza en sí mismos para que expresen sus emociones de manera favorable.

Aquí hay 6  acciones que podemos tomar para garantizar que nuestros hijos tengan la mejor salud mental posible.

1. Crear una relación de confianza y conexión

  • Propiciar una comunicación abierta, crear un espacio seguro para que los niños se expresen.
  • Crear un ambiente favorable al demostrar que usted se preocupa por lo que su hijo siente.
  • Comprender sus necesidades. Crear una sana conexión con los hijos.
  • Prestar atención a los valores, fortalezas, debilidades y expectativas de los niños.
  • Crear vínculos de confianza con ellos aumenta su autoestima.
  • Mostrar respeto por las opiniones de los hijos. Validar sus emociones.
  • Crear una atmósfera de conexión. Ambas partes se sentirán aceptadas por lo que son.
  • Escuchar activamente . Es uno de los factores más importantes para  construir esta conexión.
  • Conocer  qué retos puede asumir el niño y brindarle el apoyo para enfrentar mejor sus problemas de salud mental.

2. Fijar  límites

  • Poner límites les enseña a los niños cómo tomar mejores decisiones. Es un factor esencial para cuidar la salud mental de los hijos.
  • Establecer límites facilita que el niño maneje sus emociones y su conducta. Son factores clave para su salud mental.
  • Fijar  límites en cuanto al uso de la tecnología. De esta forma, ayudará al niño a ocuparse en tareas que aporten a su salud mental.
  • Evitar que estén expuestos demasiado tiempo frente a la pantalla; de este modo, reducir su nivel de estrés.
  • Definir límites claros ayuda a los niños a sentirse seguros y apoyados. Sin duda, tendrán una mejor salud mental a largo plazo.
  • Enseñar a sus hijos cómo tomar decisiones sabias. De esta manera, desarrollan hábitos saludables para el futuro.
  • Dar a conocer lo que conviene y lo que no. Un estado mental saludable es una de las tareas más importantes para cualquier padre.

3. Promover habilidades para la resolución de problemas

  • Incentivar la resolución de problemas en los niños. Esto les ayuda a lidiar con sus problemas de salud mental.
  • Asegurar que los niños tengan las herramientas que necesitan para controlar su salud mental ahora y en la edad adulta.
  • Enseñar a los niños a pensar de modo crítico al evaluar situaciones diversas y encontrar soluciones creativas.
  • Fomentar en los hijos el desarrollo de las habilidades para manejar su salud mental con éxito.
  • Motivar la resolución de problemas a través de análisis de eventos, noticias, temas polémicos.
  • Promover en el niño la comunicación y la autoconciencia para enfrentar momentos donde los niveles de estrés y ansiedad pueden ser altos.
  • Ayudar a los hijos a manejar su salud mental, mediante la creación de confianza.

4. Brindar un entorno seguro

  • Crear un ambiente seguro. Ayudar a los hijos a sentirse apoyados y explorar lo que siente sin miedo a ser juzgados.
  • Brindar un espacio para la comunicación abierta entre padres, maestros y otros adultos en la vida del niño.
  • Animar a los hijos a enfrentar los factores de estrés en sus vidas. Así, podrán tener una mejor actitud ante problemas futuros.
  • Expresar amor forma parte esencial de un entorno seguro.
  • Crear un entorno seguro también permite a los padres hablar sobre los problemas de salud mental con sus hijos, sin temor a críticas.
  • Cuidar la salud mental de los hijos, sin descuidar lo que usted siente.
  • Incluir rutinas y horarios para las actividades que el niño realice en su día a día.

5. Brindar tiempo para experimentar

  • Darle la oportunidad a los hijos de probar nuevas actividades e ideas.
  • Abrir el espacio que necesitan para explorar sus propios intereses y talentos.
  • Estimular en los hijos la confianza en sí mismos.  Muestre alegría cuando tienen éxito en algo.
  • Estar disponibles para brindarles apoyo emocional. Demuestre que está allí en momentos difíciles.
  • Expresarse de manera creativa les ayuda a tener buenas relaciones con compañeros y adultos.
  • Brindar a los hijos la libertad de decidir qué hacer o qué no hacer puede darles una sensación de logro.
  • Facilitar el aprendizaje de nuevas habilidades para reforzar su autoestima.
  • Disponer de tiempo para compartir nuevas experiencias junto con los hijos.

6. Escuchar y respetar

  • Respetar los gustos, preferencias, temores y frustraciones de los hijos.
  • Escuchar sin juzgar  hará que su hijo hable con confianza sobre lo que siente.
  • Tomar en cuenta las necesidades individuales de los hijos. Esto hará la comunicación más fluida.
  • Escuchar y respetar son elementos clave para hacer que el niño hable sobre sus problemas.
  • Conocer lo que piensa el niño es un paso crucial para ayudarlo a darle frente a sus problemas.
  • Escuchar sin interrumpir cuando converse con los hijos.
  • Escuchar activamente le permitirá reconocer los signos y síntomas de los problemas de salud mental de los hijos.
  • Respetar las preocupaciones de los hijos también es un acto de amor.

Una de las acciones más importantes  para ayudar a nuestros hijos con su salud mental, es mostrarles amor sin condiciones. El amor sin condiciones significa que los apoyamos y los aceptamos,  sin importar lo que hagan o cómo se sientan. Es el tipo de amor que les dará la fuerza y el coraje para afrontar conflictos en la vida, por difícil que sea.

Es necesario observar los cambios que se puedan dar en el comportamiento o estado de ánimo del niño. Si se identifica cualquier problema desde el principio, se podrá atacar a tiempo. Al tomar estas medidas, los padres pueden ayudar a sus hijos a mantener una buena salud mental. Los ayuda a reconocer las situaciones complicadas que se le presenten y a asumir el control de ellas.

Si desea conocer más sobre este tema, le invitamos a revisar las siguientes lecturas:

6 Estrategias para hablar con los hijos sobre salud mental

Protegiendo la salud mental de sus hijos según su edad

 

COMO TENER PAZ MENTAL EN LAS FESTIVIDADES

La paz interior es una sensación subjetiva de bienestar, es impalpable pero muy real ya que nos llena de una profunda tranquilidad. Se trata de un estado en el que nos liberamos de nuestras principales preocupaciones, miedos, estrés y sufrimiento. 

Sin embargo, la paz interior implica mucho más que liberarse de las emociones y sentimientos negativos, también significa ser conscientes de las maravillas de la vida y sentirse plenamente conectados con el universo y con nosotros mismos.

La paz interior es una sensación de calma en la que dejamos de luchar contra los pensamientos y las emociones negativas y perturbadoras, aunque eso no significa que no existan sino que dejan de dominarnos y causarnos daño porque no les damos una importancia excesiva ni permitimos que se conviertan en preocupaciones recurrentes. Es un estado en el que nos apartamos mental y emocionalmente de los problemas y conflictos cotidianos, asumimos una distancia psicológica para disfrutar de la serenidad.

Aquí le mostramos algunas maneras de apoyar su salud mental y emocional mientras se prepara para las festividades.

  1. Haga lo que sea mejor para usted y su familia. …
  2. Establezca expectativas y límites realistas. …
  3. Reconozca y respete sus sentimientos. …
  4. Practique el autocuidado. …
  5. Comuníquese si necesitas ayuda.

Si las festividades de la temporada son difíciles: Aquí le damos algunos recursos para la salud emocional y mental.

La temporada de días festivos, como las fiestas navideñas, es un momento de compartir, conectarse, recordar y celebrar. Para muchas personas, las festividades siempre han sido difíciles.

Si le resulta difícil disfrutar plenamente de las festividades, no está solo. Todos nosotros estamos descubriendo cómo celebrar de manera que apoye nuestra salud, que es más que protegernos contra COVID-19. Aquí hay algunas maneras de apoyar su salud mental y emocional mientras se prepara para las festividades.

  1. Haga lo que sea mejor para usted y su familia.

Hemos aprendido juntos sobre las muchas formas en que podemos protegernos contra COVID-19. Seguir estas precauciones hará que su reunión sea más segura. Y lo más importante es hacer lo que es mejor para usted.

  1. Establezca expectativas y límites realistas

A medida que vamos teniendo, este año, la posibilidad de tener reuniones navideñas como tradicionalmente las celebrábamos antes, es posible que sienta más de la presión habitual para hacer que estas festividades sean perfectas o ponerlas “de vuelta a la normalidad”. O aún puede que se sienta que debe llevar mucho cuidado o que se sienta con inseguridad acerca de cómo celebrar.

No tenga miedo de hablar y establecer límites, ya sea sobre vacunas, el uso del nasobuco, la sana distancia o temas para conversar en la mesa. También puedes decir “no” cuando algo está fuera de los límites que estableció.

Asegúrese de hacer planes que:

  • Le hagan sentirse con seguridad.
  • Se ajusten a su tiempo y presupuesto.
  • No le causen demasiado estrés.
  1. Reconozca y respete sus sentimientos.

Cuando ignoramos los sentimientos negativos, no desaparecen. Ya sea que sienta ira, ansiedad, estrés, soledad, dolor o depresión, nombrar y procesar sus sentimientos le ayudará a tomar el control de esos sentimientos.

  • Nombre el sentimiento.
  • Permítase sentir las emociones en su cuerpo.
  • Piense en por qué se siente de esta manera.
  • Cuando encuentre la causa, sea amable consigo mismo.

También tómese el tiempo para reconocer y apreciar los sentimientos positivos, incluida la gratitud. Algunas herramientas que pueden ayudarle a manejar sus sentimientos incluyen:

  • Ejercicios guiados de relajación, meditación o atención plena.
  • Escribir en un diario.
  • Expresión creativa como cantar o hacer música, escritura creativa o crear obras de arte.
  1. Practique el autocuidado.

Ser amables con nosotros mismos y mantenernos conectados con amigos y seres queridos, incluso cuando no tenemos tiempo diario para el cuidado personal que necesitamos, puede ayudarnos a mantenernos equilibrados y mantenernos bien.

  • Recuerde comer, beber agua y dormir lo suficiente. Estos son los componentes básicos del autocuidado, pero a menudo son las primeras cosas que descuidamos durante los momentos de estrés.
  • Trate de construir alguna conexión social en su rutina regular de una manera que funcione para usted, ya sea en persona, a distancia, en línea o por teléfono. Es mejor no esperar a que la tristeza o la soledad se establezcan, porque a veces eso puede hacer que sea más difícil llegar a su reunión o cita de conexión social.
  • Muchas personas encuentran que estar activo es bueno tanto para su mente como para su cuerpo. El ejercicio al aire libre, solo o con los miembros de su hogar o amigos, puede ser una forma efectiva de relajarse y ayudar a combatir los sentimientos de tristeza o ansiedad. También puede hacer ejercicio en su propia casa, solo o uniéndose a clases de ejercicio en línea.
  • Establezca expectativas y límites personales y aprenda a decir no, también son aspectos importantes del autocuidado.
  1. Comuníquese si necesitas ayuda.

Si tiene dificultades, puede hablar con personas que lo apoyen en su vida, como amigos o familiares. Si necesita a alguien a quien contactar, hay muchos recursos para apoyar su bienestar mental y emocional durante todo el año.

5 consejos adicionales para mantener la paz interior en las fiestas de fin de año

  1. Mantén un tiempo diario destinado a respirar conscientemente y a meditar, así sea más corto de lo que acostumbras o en otro horario.
  2. Evita excederte en el consumo de comidas pesadas, con mucha grasa y/o azúcar, así como de bebidas alcohólicas. Sé que los postres y las comidas tradicionales de nuestros países son deliciosas, no obstante, su consumo en exceso puede generarte molestias digestivas, restarte energía y sacarte de balance.
  3. Conéctate con tus familiares y amigos sin expectativas y sin juicios, como si fueran extraños que hasta ahora vas a conocer. Disfruta y valora el momento presente con ellos, es lo que te regala la vida, recordando que el pasado ya no existe y el futuro no ha llegado.
  4. Después de varios días de reuniones o actividades sociales, destina un día para quedarte en casa y descansar, para reconectarte con tus espacios e intimidad. Si tienes la oportunidad, pasa un tiempo en la naturaleza.
  5. Recuerda que cuidar de ti es importante. El amor propio no es vanidoso ni egoísta. De hecho, es lo más altruista que puedes hacer por quienes te rodean, recargar tu luz para que brille más fuerte hacia ellos.

Trauma infantil: Cómo ayudar al niño después de un trauma

Ante la realidad del trauma infantil es importante brindar un ambiente cálido, seguro y, sobre todo lleno de amor. Pues, los niños que han sufrido algún trauma se enfrentan a una sensación constante de amenaza e inseguridad.

Si los padres o cuidadores no tienen una comprensión adecuada de los efectos y secuelas del trauma pueden causar dolor y frustración. Hoy pretendo profundizar un poco sobre la naturaleza del trauma y cómo podemos ayudar con eficacia al niño afectado.

Naturaleza del trauma infantil y sus efectos

El trauma infantil tiene su vértebra en el alto nivel de estrés que genera o culminará el evento adverso sobre el niño. Tal afección es capaz de minar su capacidad innata de resiliencia para sobreponerse a situaciones traumáticas. Y, en su lugar, el niño comienza a generar respuestas de evasión, lucha o parálisis.

Estas tres posibles respuestas están ligadas a los siguientes efectos:

  • Dificultad para mantener la concentración, pensar y memorizar.
  • Imposibilidad de manejar las respuestas fisicas ante las situaciones que le resultan
  • Inconvenientes para cambiar de una actividad a otra.
  • Cambios hacia la percepción de sí mismo: poca estimación y pérdida de confianza.
  • Sensación de desamor y de culpabilidad por lo acontecido.
  • Pérdida del sentido de la vida.
  • Dificultad para establecer y mantener relaciones afectivas.
  • Falta de manejo en sus impulsos.

Lo que siente el niño

Partiendo de la breve descripción anterior ¿podrías imaginar lo que siente el niño? Ante esas circunstancias ¿Cómo responderías tú? Pues bien, ampliamos un poco más el panorama del trauma infantil para ayudarte a apoyar tus ideas.

Dadas estas alteraciones en su cerebro , cuerpo y emociones el niño irá adaptándose sintiendo la necesidad de protegerse. Y se protegerá en modo de supervivencia; es decir, reaccionar y desarrollar comportamientos agresivos, de desobediencia, desconfianza y hasta de disociación.

También es posible que incluso el niño recuerde algunos aspectos del trauma a través de sensaciones, olores, posturas, lugares, sonidos. Cuando esto ocurre su mente, abrumada por el recuerdo, puede provocar comportamientos bruscos sin medir consecuencias.

Tan solo un poco de tiempo

Abordar el trauma infantil no es sencillo y requiere de tiempo y paciencia. Es importante saber que al niño le tomará tiempo aprender que su entorno ahora será seguro y que no tiene que defenderse.

La nueva convivencia será como un entrenamiento continuo para que su cerebro y su cuerpo aprendan a responder de manera apropiada a los estímulos de seguridad que reciban.

La buena noticia es que el amor lo puede todo, sabe esperar, es paciente y bondadoso, amable y benigno ( 1 Corintios 13 ). ¡Hay esperanza! ¡No todo está perdido! Tanto el niño como toda su familia necesita reorientar su visión frente a lo que ocurre ahora, en el presente.

Acciones concretas para ayudar al niño después de un trauma

Hasta este momento ya conoces la naturaleza del trauma infantil   y la razón del comportamiento de tu hijo. Esto quiere decir que podrás aplicar acciones concretas y tener paciencia ante los resultados.

Por otro lado, sabes que hay esperanza y ésta será el antídoto que te permitirá encontrar sentido y cambiar la visión de tu presente no tan agradable. La esperanza es un recurso valioso para fortalecer la salud mental en estos momentos. La esperanza conduce la mirada hacia el bien posible que llegará.

Ahora, continúa con las siguientes acciones:

  • Asumir la situación en familia.

Además de poder apoyarse las tecnologías, es importante saber que ante situaciones de crisis los miembros de la familia tienden a aislarse fracturando las relaciones. Esto conducirá a que se generen otros conflictos que desactivarán el estrés en el niño. Juntos permanecerán en la fe del amor de Dios. Busquen el acompañamiento espiritual.

  • Reorienta tu visión

Evita enfocarte en el evento, en lo que pudo ser y no fue, en el lamento del ¿Por qué a mí? Enfócate en reconocer los recursos (internos y externos) que tienes disponibles y encontrar soluciones. Descubre el bien posible de esta situación (Romanos 8.28)

  • Reconoce los factores que reviven el trauma

Para abordar el trauma infantil en casa, es necesario evitar situaciones que puedan revivir el evento traumático y suscitar reacciones confusas o estresantes en el niño. Un factor detonante puede ser algo que se dijo o se hizo.

Fíjate en los comportamientos inapropiados al clima o situación del momento. Juntos en familia, traten de descubrir qué lo distrae, por qué se pone ansioso, qué desborda sus emociones.

  • Ayuda a fortalecer la confianza y la autoestima

Esto es posible creando un ambiente seguro entre gestos y tratos amorosos que se deben repetir a diario. Esto hará que el niño se vaya adaptando al nuevo escenario.

También es favorable incentivar al niño a tomar decisiones acordes a su edad. Así, él vestirá que puede tener control de su vida y fortalecerá también su autoestima.

  • Establece rutinas diarias

Recuerda que uno de los efectos del trauma es la dificultad que puede tener el niño para cambiar de una actividad a otra. Por eso, elabora rutinas para la alimentación, la recreación y horas de siesta. Además, con anticipación, notifique a su hijo la actividad próxima a realizar y asegúrese de que lo haya comprendido.

Otros recursos

Dos recursos potencialmente útiles para transitar la crisis de un trauma infantil son:

  • La meditación

En el momento oportuno practica con tu hijo la meditación cristiana . Algunas investigaciones han comprobado que la meditación ayuda a potenciar la atención y favorece la autorregulación emocional. Este es un recurso muy favorable y que recomiendo con responsabilidad.

  • La orientación profesional

Buscar la guía profesional es, más que útil, necesaria y determinante para un abordaje adecuado. Pues, más allá de ayudarte a manejar la situación, el profesional de la salud mental te guiará en los avances identificando si se requiere un cambio de abordaje, entre otros.

¿Quieres mayor información? ¿Tienes la necesidad de un acompañamiento genuino? Estoy dispuesto a ayudarte. Contáctame al número 407 618 0212.

¿Cómo prevenir el suicidio en niños y adolescentes?

Hablar de cómo prevenir el suicidio en niños y adolescentes es tocar un tema «tabú» que genera resistencia emocional en muchos padres. De hecho, algunas personas aún creen que solo los adultos toman ese tipo de decisiones, pero no es así.

La muerte de un niño o adolescente ya es, en sí misma, devastadora. Pero solo pensar en que esta ocurra por su propia mano resulta inconcebible ¿Cómo puede ocurrir algo así? ¿Qué circunstancias llevan a alguien tan jóven a suicidarse? ¿Se puede prevenir?

De todo esto te hablaré a continuación. De la mano de Dios y con su Bendición compartiré contigo este tema delicado, pero necesario.

¿Se puede prevenir el suicidio en niños?

Sí, se puede prevenir el suicidio en niños, y es primordial empezar a hacerlo. Según investigadores del Centro para el Control de Enfermedades (EEUU), desde el 2020, el suicidio es:

  • La segunda causa de muerte entre niños de 10 – 14 años.
  • La décima entre niños de 5 – 9 años.

Este incremento se asocia, en parte, a la situación de pandemia vivida desde ese año y sus implicaciones; confinamiento, alejamiento de familiares y amigos, miedo a una enfermedad desconocida, ansiedad por la situación económica de los padres, incertidumbre por el futuro. Sumatoria suficiente para sobrepasar la capacidad de asimilación de un niño.

La Biblia nos dice, «Un espíritu aplastado te deja sin energías» (Proverbios 17:22). Y es muy cierto, la tristeza y el miedo han venido a aplastar el espíritu de muchos de nuestros niños y adolescentes en el mundo, desmoronando sus defensas naturales.

Factores de riesgo

La pandemia y sus secuelas no son las únicas causas del problema. Otros factores de riesgo pueden desencadenar pensamientos y conductas suicidas:

  • Perder a un ser querido por fallecimiento o abandono. Eso incluye los fracasos amorosos en adolescentes.
  • Cambios drásticos en rutina, como una mudanza lejos de su grupo de amigos.
  • El acoso escolar o familiar.
  • El fracaso escolar.
  • Ansiedad y problemas mentales: depresión, trastorno disocial, esquizofrenia, estrés postraumático.
  • Adicción a sustancias como drogas o alcohol. Los problemas con la ley que ello conlleva (en adolescentes).

Y, por inverosímil que pueda parecerte, algunos niños usan el suicidio como herramienta de manipulación. El enojo y falta de control de los impulsos puede llevarlos a perder la vida en un intento por castigar a otros.

Claves para prevenir el suicidio en niños

Hasta aquí te he mostrado el contexto de este grave problema. Pero, Dios no nos da pruebas que no podamos enfrentar; de manera que, como padres, podemos evitar que un niño cometa este terrible acto contra sí mismo ¿Cómo se puede hacer?

●     Demuéstrale que es escuchado

Comunicarse no es solo hablar: «Todo hombre tiene que ser presto en cuanto a oír, lento en cuanto a hablar» (Santiago 1:19). Un adolescente, a veces, solo necesita saber que es escuchado con respeto y aceptación.

Según el Dr. Jonathan Singer, psiquiatra experto en suicidios, una acción  preventiva es preguntar al niño si piensa en morir. Para este especialista, niños con problemas mentales, de socialización u otros traumas deben ser motivados a hablar sobre posibles pensamientos suicidas.

●     Reconoce su lenguaje no verbal

Nuestras palabras transmiten el 30% de lo que queremos comunicar; el 70% restante lo dice nuestro lenguaje no verbal. Dale los buenos días a tu hijo, pregúntale cómo está y obsérvalo; seguro te dirá «bien» pero, ¿Y su cuerpo? Sus ojos, manos, postura corporal pueden estar diciéndote algo muy distinto. Ser perceptivo te ayudará a detectar a tiempo cualquier señal de alarma.

●     Observa sus hábitos de higiene

Una vez más te hablo del valor de observar. Conoces a tu hijo, sabes cuáles son sus hábitos de higiene y cuidado personal. De manera que cualquier cambio en estos, como dejar de lavarse los dientes, de ducharse o pasar mucho tiempo con la misma ropa, en fin, pueden estar mostrando un cuadro depresivo. Tal vez sea hora de consultar a un especialista.

●     No ignores sus amenazas de suicidio

Insisto en las señales. Si los escritos, dibujos o expresiones de tu hijo te indican que se está pensando en morir, tómatelo muy en serio. Con frecuencia, estas manifestaciones no son manipulación sino una desesperada petición de ayuda.

Tal vez no lo esté pensando realmente y solo quiera tu atención, pero ¿Estás dispuesto a correr el riesgo? Lo que te sugiero es que busques apoyo psicológico y espiritual lo más rápidamente posible y así evitar que esta amenaza se materialice.

●     No tengas armas de fuego en casa

Si debes tenerlas guárdalas en forma segura. Según el Centro Brady, un elevado porcentaje de adolescentes en Estados Unidos se suicida cada año con armas de fuego que encuentran en su hogar. También elementos como alcohol y medicinas deben estar bajo llave si vives con un adolescente con tendencias suicidas.

●     Intégralo a las actividades familiares

Trata de que no se aísle de su familia y amigos. Hazle saber que su aporte y presencia en los eventos familiares es valiosa. Pero no lo presiones, si su aislamiento es un signo de depresión no servirá de nada obligarlo porque,  de cualquier forma se sentirá solo. Solo anímalo y dile que la familia lo extraña.

Dale a tu hijo el regalo de la Fe 

La inmensa responsabilidad de formar a un hijo no es solo alimentarlo, vestirlo y educarlo. Hay un alimento fundamental para el espíritu: la Fe. Si le das a tu hijo amor, respeto y lo ayudas a establecer una hermosa relación con Dios, este lo sostendrá en los peores momentos. La duda, el temor, la ira o el desaliento no harán hogar en su alma, porque Dios está allí.

Y si tu intuición de padre te dice que algo no está bien, y que tu hijo puede estar desarrollando tendencias suicidas, busca ayuda profesional. Tu amor y el de Dios y la ayuda de un especialista lo ayudarán a superar ese inminente peligro en su vida.

Suicidio en niños y adolescentes: ¿Por qué aumentó durante la pandemia?

El elevado índice de suicidio en niños y adolescentes es uno de los hechos devastadores agravados por la pandemia COVID-19. Las cifras registradas entre el periodo 2020 y 2021 son alarmantes. Y es todavía preocupante que ha pasado un año más y las secuelas parecen no tener fin.

¿Qué puede ser tan nefasto para un niño o adolescente como para recurrir al término de su vida? Pues, ésta apenas comienza a florecer. Este es un tema realmente cargado de toda sensibilidad y quiero que podamos comprenderlo juntos.

¿Ocurría el suicidio en niños antes de la pandemia?

La respuesta es sí. Lamentablemente los hechos de suicidio en niños y en adolescentes se registra desde hace muchos años atrás. Las causas asociadas han sido diversas y pese a los esfuerzos de padres, cuidadores y organizaciones interesadas, no ha sido posible evitar que esto ocurra.

En registros del Estado Mundial de la Infancia 2021 de la UNICEF, puede encontrarse que  la población infantil ya manifestaba necesidad de atención en salud mental antes de la pandemia. También otros medios estadísticos hacen medias comparativas con cifras de suicido en infantes en el año 2019.

¿Por qué las cifras aumentaron durante la pandemia?

Me importa mucho mencionar que, en base a los datos anteriores, no podremos mirar la llegada de la pandemia como la causa de los suicidios. Pero, sí como un detonante para que estos siguieran ocurrieran y en mayor porcentaje, según estadísticas reveladas.

Ahora bien, antes de consumar un hecho suicida la persona (de cualquier edad) habrá experimentado una condición mental alterada; es decir alejada de las condiciones saludables y en una mirada de su ser con poca valía.

Por supuesto, el confinamiento (asilamiento social), la incertidumbre y las perdidas fatales de familiares y de miles de personas a nivel mundial eran condiciones ideales para suscitar ansiedad, desasosiego y depresión. Sin duda, la condición mental perfecta que induce el suicidio en niños y jóvenes.

Confinamiento, incertidumbre y muerte: Una mirada infantil

Quienes conocemos sobre el desarrollo y comportamiento humano sabemos que los más pequeños son especialmente sensibles a los cambios en su rutina y hábitos. De este modo, aislarse de sus seres queridos, amigos y actividades de su agrado, no es sencillo para un niño ni para un joven adolescente.

Los infantes están comenzando a explorar su entorno, y los jóvenes adolescentes están deseosos de independencia, libertad e integración ¿Cómo soportar la clausura y controlar estas necesidades tan propias de su ser?

Te invito a ponerte en los zapatos de un niño y a que mentalices lo siguiente:

  • ¿Cómo limitar mis ganas de correr (y otros) al espacio de la casa y sin amigos o personas distintas a papá y mamá?
  • Suma la interrogante ¿qué está pasando y cuando va a terminar esto?, y espera la respuesta de padres o adultos notablemente agobiados y en crisis; ansiosos y, muchas veces, enojados.
  • «Nada será igual porque a muchos ya nos los volveré a ver».
  • «Mamá, papá ¿También vamos a morir?» y espera la respuesta de padres o adultos enojados por tantas preguntas que haces. Sientes que tus inquietudes «le quitan tiempo» para pensar qué hacer y, además, está más abrumado que tú.
  • ¿Cómo lo manejarías? Responde sobre la misma posición de un niño.

El detonante del suicidio en niños que se ignora

Se trata de la crisis del interior del ser y por consiguiente de la familia. Para mí, esta es la raíz del suicidio en niños y jóvenes. Y, no se menciona porque todavía es ignorada y no es aceptada.

No es un secreto que vivimos en un mundo donde el sentido de la vida ha sido dirigido por el tener y el hacer. La pandemia suprimió a cada uno lo que hacía y tenía; trabajos, juegos, entretenimientos, estudios, títulos, dinero, control, estatus, seguridad, vicios. Fue ésta la mayor incertidumbre.

Cada miembro de la familia estaba inmerso en sus actividades y en sus propias vivencias e individualidades. La pandemia los reunió a todos en un mismo lugar; el hogar, y en teoría esto debió ser beneficioso. Pero, con ello comenzaron a relucir los profundos vacíos personales y familiares existentes.

Esta situación de emergencia en la que cada uno necesitaba sentirse entendido, escuchado y valorado contrariamente hizo notar que eran agredidos, señalados, cuestionados, ignorados, minimizados. Y siempre había ocurrido, pero con el afanoso tener y hacer del día a día no se había notado.

Dulce o amarga compañía en casa

Estar en casa con quienes amamos ha de ser una dulce compañía para cada uno; especialmente, para nuestros pequeños. Cuando ocurre todo lo contrario se genera en los jóvenes una sensación de soledad que provoca un impacto profundo en su valía y en su dignidad.

Cuando la sensación de poca valía permanece en una mente joven y menos madura existe la tendencia al suicidio. Ahora entenderás, por qué después del confinamiento el suicidio en niños y adolescentes aún sigue sumando cifras.

Y después de la pandemia ¿qué?

Aún permanece la crisis sanitaria, pero retomamos las actividades adoptando y manteniendo las medidas de bioseguridad. El confinamiento ha cesado, la incertidumbre ha mermado; sin embargo, las secuelas permanecen y los suicidios en infantes continúan.

¿Cómo retomar la salud mental? Brindando mayor presencia del amor y retomando el verdadero sentido de la vida. La pandemia ha demostrado que el tener y el hacer no son lo esencial para estar a plenitud.Guiémonos en la presencia del amor, y Dios es amor (1 Juan 4.8; Colosenses 3.14).

En esa Presencia se trasciende la falta de cercanía, de escucha, de apoyo, de cobertura y esa sensación de desamor que precede al pensamiento de suicidio en niños y adolescentes. El amor es lo que da sentido a la vida de las personas (1 Corintios 13.2).

En ese mismo amor quiero brindarte mi compañía y mi cobertura ante cualquier situación de dificultad con tus hijos y tu familia. Puedes contactarme a este número 407 618 0212.

Vencer pensamientos obsesivos: Ejercicios para poder lograrlo

Preocupaciones y miedos revoloteando en tu cabeza por doquier y de forma repetitiva. Si te sientes identificado/a con esa descripción que acabo de dar, debes conocer a la perfección el poder de los pensamientos obsesivos; esa clase de pensamientos que tanto nos ha afectado por las cifras de una pandemia que parece nunca acabar. Sin embargo, no es sano vivir atado/a a estos- Ahora más que nunca, debemos vencer pensamientos obsesivos.

Aunque la mayoría puede experimentar pensamientos obsesivos, el problema es que, al recomendar batallar con estos, quizás la primera idea que tengas sea la de suprimirlos o eliminarlos. Esto es contraproducente y no resultará tan bien como esperas. Ellos terminarán volviendo, con más fuerza de la que tuvieron inicialmente.

 

¿Cómo vencer pensamientos obsesivos?

 

Para vencer pensamientos obsesivos de manera efectiva, la mejor alternativa es aplicar algunos métodos potenciales para luchar contra ellos. El psicólogo social Daniel Wegner estudió y publicó en American Psychologist diversas herramientas para este propósito, de la cuales hablaremos a continuación.

La distracción enfocada

Comenzamos con un ejercicio simple para vencer pensamientos obsesivos, la distracción enfocada. Esta consiste en desconectar tu mente de aquella fuente de preocupación, y para lograrlo, enfocarte en algo más que te distraiga. Tu mente puede seleccionar millones de temas que te ayudarán a aliviarte.

También puedes optar por divagar y perderte en el mar de tus pensamientos, lo cual no es tan recomendado porque es considerado como improductivo. Lo mejor es concentrarse entonces en realizar una tarea doméstica, ver un programa de televisión educativo, escuchar un álbum musical, etc. La idea principal es darle a la mente un objetivo, porque las mentes sin objetivos suelen estar asociadas con la infelicidad.

Posponer para más tarde

Un método que sigue siendo igual de intuitivo para vencer pensamientos obsesivos es el de posponer el pensamiento para más tarde. Muchos estudios han comprobado que suprimir los pensamientos solo hace que estos vuelvan con más intensidad. No obstante, posponerlos puede ser un alivio para la mente.

Funciona así: reserva un momento del día para dar rienda suelta a tus pensamientos obsesivos. Este no puede pasar de 30 minutos, pero el resto del día necesitas guardar todas esas preocupaciones para ese límite de tiempo. Con la práctica, te percatarás de cómo esto se va volviendo una costumbre, y serás capaz de deshacerte de los pensamientos obsesivos cuando tú así lo quieras.

Escribir en papel

Escribir sobre cualquier cosa en tu vida como un método de liberación, da resultados maravillosos. Por lo tanto, uno de los ejercicios tiene relación directa con la lucha contra los pensamientos obsesivos y la escritura.

¿Cómo funciona? Escribe abiertamente sobre tus pensamientos obsesivos, de todos los que tengas. Incluye también tus sentimientos más profundos, y redacta en general cualquier cosa que desees comentar sobre el tema.

Deshacerse de toda esa negatividad en el papel y transportar los pensamientos desde adentro de tu cabeza a la realidad, a algo tangible, te ayudará a sentirte mejor y a desarrollar resiliencia. Puede que incluso te ayude a no pensar más en ellos por el resto del día.

La autoafirmación

Todos, como seres humanos imperfectos que somos, tenemos cosas buenas y malas. No obstante, es una costumbre para algunos priorizar el hablar solo de lo malo. Nadie conoce nuestras imperfecciones o debilidades mejor que nosotros mismos, pero, como un ejercicio para nuestro bienestar, es recomendable usar la autoafirmación para vencer pensamientos obsesivos.

Medita más a menudo en tus rasgos y características positivas. Es algo que te ayudará a tener un mayor autocontrol y confianza social. La próxima vez que recuerdes cuán preocupado/a estás por tu trabajo, cambia ese pensamiento por uno más agradecido y optimista.

Más alternativas por conocer

La insistencia de los pensamientos obsesivos puede seguir combatiéndose con otras técnicas que considero muy eficientes. Lo mejor de ello, es que son accesibles y sencillas de poner en práctica con poco esfuerzo. Estas son algunas de mis favoritas:

  • Meditación cristiana: La meditación cristiana trata de enfocarnos en el pensamiento acerca de Dios y Su Palabra. Al meditar estamos expresando una forma de oración, y no únicamente eso, sino que también estamos comprendiendo el poder detrás de sus lecciones. También aprendemos de la importancia de una actitud compasiva y misericordiosa hacia nuestro prójimo. “¿A quién tengo en el cielo sino a ti? Si estoy contigo, ya nada quiero en la tierra. Podrán desfallecer mi cuerpo y mi espíritu, pero Dios fortalece mi corazón; Él es mi herencia eterna” – Salmo 73:25-26.
  • Ejercítate: Cuando te sientas agotado/a de tantos pensamientos obsesivos, te sugiero que salgas a dar una caminata muy larga o a ejercitarte del modo que más te guste. Estarás haciendo bien a tu cuerpo, pero más allá de eso, salir al aire libre te ayudará a apreciar los matices de la vida, la belleza de la naturaleza, los pequeños milagros que no somos capaces de ver en nuestras rutinas por estar más concentrados en los negativismos.
  • Habla con un/una amigo/a: Todos necesitamos ser escuchados/as, y que alguien cercano/a escuche nuestras preocupaciones nos ayudará tanto a descargar preocupaciones como a obtener consejos desde un punto de vista más objetivo. Así podremos organizar mejor nuestras ideas y tener una visión más realista de nuestra vida.

 

¿Cuándo es hora de buscar ayuda profesional?

 

A pesar de lo comunes que pueden llegar a ser los pensamientos obsesivos, estos pudieran formar parte de los síntomas de ciertos trastornos mentales como el Trastorno Obsesivo-Compulsivo.

En este caso en particular, las personas se sienten sobrepasadas por sus pensamientos, no tienen control de estos y la forma de aliviarse es mediante acciones compulsivas. Por ejemplo, lavarse las manos, contar, limpiar, etc. Ambas, obsesión y compulsión, están relacionadas con obviedad, pero la persona no podrá romper con ello.

Asimismo, estos pensamientos, en especial los relacionados con el pasado y el pesimismo extremo sobre el futuro, son propios de la Depresión Mayor. Otros trastornos, aparte de los ya mencionados, son los de la ansiedad generalizada y el estrés postraumático. Por lo que, de sospechar la presencia de alguno de estos, lo más sensato es buscar ayuda profesional.

 

¿Sientes que necesitas asistencia profesional? Llama al 407 618 0212.

Pensamientos obsesivos: ¿Cómo puedo gestionarlos?

Los pensamientos obsesivos o pensamientos automáticos negativos suelen estar relacionados con los trastornos de ansiedad, así como también con la depresión mayor. Pero ellos no son exclusivos de quienes sufren problemas emocionales.

¿Sientes que no puedes dejar ir ciertos pensamientos en los últimos meses? El contexto actual mundial, los altos índices de estrés y un futuro incierto, son razones de peso para explicar todo lo que está ocurriendo con esta clase de pensamientos.

Si no sabes cómo lidiar o enfrentar los pensamientos obsesivos, te pediré que no seas muy duro/a contigo mismo/a. Algunas veces, aunque el esfuerzo por eliminarlos sea grande, no es suficiente. Esta es una situación que solo servirá para generarte preocupación y desesperanza.

¿Nunca podré encontrar paz mental? ¿Por qué no puedo callar esos pensamientos? ¿Hay algo mal en mí? Sobre estas dudas deseo que profundicemos juntos.

 

¿Qué son los pensamientos obsesivos?

 

Una manera sencilla de entender qué es un pensamiento obsesivo, es verlo como un contenido mental de naturaleza amenazante, automática e indeseada. Los pensamientos obsesivos pueden estar representados en forma de imágenes o de palabras.

También pueden enfocarse en hechos del futuro o en la reexperimentación del pasado, lo que hace tan agotadora a esta clase de pensamientos, es que están acompañados de emociones muy complicadas e intensas, que tarde o temprano terminarán agotando tus recursos afectivos.

Cuando tu cerebro se enfrenta a un contenido amenazante, las respuestas fisiológicas de miedo son comunes. Pero, que el estímulo que provoca este temor no esté realmente presente, sino que deambule de aquí a allá en tu cabeza, es lo que le da esa persistencia tan agotadora.

De hecho, tu sistema nervioso simpático, que es una de las ramas que conforman el sistema nervioso autónomo, interpretará esto como una experiencia directa, logrando activar todos los recursos necesarios para huir o luchar. Es aquí en donde la ansiedad aparecerá.

 

¿Cómo gestionar los pensamientos obsesivos?

 

Es una ardua tarea la de gestionar los pensamientos obsesivos; necesitarás voluntad, disciplina y mucha fe. Y, es que tratar de gestionar nuestros sentimientos nos hará luchar contra nuestros propios resortes mentales, esos que muchas veces ni sabemos que existen.

Dios nos apoya aun cuando creemos que no lo está haciendo, que se ha olvidado de nosotros y que seremos incapaces de superar las adversidades.

Sé que te preocupa el futuro. Sé que te duele el pasado. Sin embargo, quiero que entiendas que el primer paso para batallar contra los pensamientos obsesivos es no tener miedo. Por el contrario, necesitas aprender de qué tratan, por qué están allí y cuáles son esos conflictos sin resolver que tienes dentro de ti.

¿Te encuentras atrapado/a en estos? No eres el único/a. El COVID19 nos ha llevado a extremos que no fuimos capaces de predecir o esperar. El riesgo sanitario, las restricciones en nuestra vida cotidiana y la zozobra por el porvenir, quizás no te dejen dormir ciertas noches y es comprensible.

¿Cómo puedo controlarlos? Estas son algunas lecciones que espero te sean de ayuda.

Los pensamientos obsesivos son como las arenas movedizas

Las metáforas nos ayudan a interiorizar conceptos que no somos capaces de comprender por completo todavía. En el caso de los pensamientos obsesivos es lo mismo. Así que, quiero que veas a estos como si fueran una trampa de arenas movedizas. Es una comparación que habla por sí misma.

Cuando caes en arenas movedizas, tu instinto de supervivencia hará que te muevas con desesperación tratando de huir de ellas. Pero no lo conseguirás, solo te hundirás más. Lo mismo ocurre con los temidos pensamientos obsesivos. La única forma exitosa de salir de ellos será calmarte, aceptar que estás en una zona peligrosa, y medir cada movimiento para conseguir escapar.

Luchar directamente contra un pensamiento negativo no te hará ganar. Primero, debes aceptar que lo tienes y analizarlo por alrededor de 20 minutos. Cuando acabe ese tiempo, concéntrate en otra actividad, y después vuelve a dedicarle el mismo tiempo a tu pensamiento obsesivo. Poco a poco encontrarás una manera de salir de este y de aliviarte.

Dejar fluir tus emociones te dará calma

Mucho hablamos de las emociones, cómo nos afectan y cómo nos identifican como seres humanos que somos. Pero, algo que necesitas saber es que, para gestionar pensamientos obsesivos adecuadamente, debes esforzarte por dejar fluir tus emociones.

Acepta que te sientes mal, déjalo fluir, aunque ello conlleve a derramar una que otra lágrima. En algún momento te darás cuenta de que este tipo de emociones se agotan por sí mismas y el dolor se irá. Por ejemplo, si te picó un mosquito en el cuello, querrás rascarte, pero al no hacerlo estarás protegiendo tu piel y evitando agravar la situación.

Necesitamos abrazar más nuestras emociones, no silenciarlas o pretender callarlas porque no nos agrada cuán débiles nos hacen sentir. No ser fuertes los 365 días del año no es una debilidad o un pecado.

Dios es nuestro amparo

En tiempos de incertidumbre como estos, recordar la presencia de nuestro Señor nos ayudará a alivianar las cargas que tenemos sobre nosotros. No te olvides de que Él tiene el control sobre todo, y que siempre está protegiéndonos.

“Dios es nuestro amparo y nuestra fortaleza, nuestra ayuda segura en momentos de angustia. Por eso, no temeremos, aunque se desmorone la tierra y las montañas se hundan en el fondo del mar” – Salmo 46:1-2.

Cuando un pensamiento obsesivo te amenace nuevamente, busca distraer tu mente con la lectura de las Sagradas Escrituras. Refúgiate en las lecciones y sabiduría que nos ofrecen. Al encontrar la calma que tanto has estado buscando, puedes compartir tus reflexiones con tu familia y amigos, para que juntos comprendan cuán grande es la misericordia de Dios.

Si no es suficiente para ti, actúa en favor de lo aprendido. No te quedes esperando soluciones, y toma las riendas de tu vida. Busca más actividades en las cuales retribuir la misericordia de nuestro Señor.

¿No sabes cómo comenzar a gestionar tus pensamientos obsesivos todavía? Puedes llamar al 407 618 0212 para obtener más respuestas.

Cómo balancear la familia y el trabajo este año nuevo

El 2021 está a pocos días de finalizar, y con ello la bienvenida del 2022 nos espera con muchas metas por cumplir. Una de ellas y que considero es fundamental, es aprender a balancear la familia con tu trabajo. Una problemática en la que lamentablemente padres y madres están envueltos sin saber muy bien cómo actuar del todo.

Te quiero aclarar que para mí el equilibrio consiste en lograr la felicidad y aprender a sentirte a gusto con la vida que estás teniendo. Es ganar tu propia paz interior, conectar con las enseñanzas de la Palabra de Dios y ser la guía que todos esperan en tu hogar.

Tanto el ser proveedores materiales, como espirituales en nuestras casas es igual de importante. Al mismo tiempo, nunca es tarde proponerse un cambio, más si estamos hablando de la finalización de este ciclo en nuestros calendarios.  ¿Cómo soy capaz de hacer todo esto entonces?

Consejos para balancear la familia y trabajo

Llegar a un equilibrio para balancear la familia y el trabajo es duro, lo sé. Por eso no quiero que seas tan exigente contigo mismo; y desde este instante tomes notas sobre aquello que puedes modificar paso a paso:

Despídete del perfeccionismo

He perdido la cuenta de cuántos hombres y mujeres he atendido que, por ser trabajadores sobresalientes en sus áreas, consideran que la única vía de acción es el perfeccionismo. Estos desde pequeños son instruidos por fuertes estándares de rendimiento, y están acostumbrados a sobreexigirse en casi cualquier aspecto de su vida.

Sin embargo, una vez comienzas a formar tu propia familia, esa de la que eres el/la líder será imposible que todas las responsabilidades que tengas las realices con perfección. Uno de los principales consejos para balancear la familia y el trabajo es ser más permisivo con uno mismo; entender que la perfección no es una opción muy realista. Además, que siempre existirá la posibilidad de que alguno de estos aspectos presente fallos por su misma naturaleza.

Aprende cuándo es necesario desconectarte

La idea de la disponibilidad las 24 horas del día gracias al internet y demás dispositivos inteligentes, se ha vuelto sumamente asfixiante en los ambientes laborales. Hay quienes no distinguen las horas libres de su jornada de trabajo, y da la ilusión de que esta no tiene fin.

Pero sí la tiene, y queda de tu parte establecer cuándo esta se da. Los momentos en familia son sagrados. Comienza a separar lo uno de lo otro.

Por ejemplo, si recibes una notificación de trabajo mientras estás en una cita con tu pareja, trata de no reaccionar en un punto importante de la conversación. Practica tu propia resiliencia, y así verás cómo puedes enfrentarte con un mejor rostro al estrés.

Invierte más tiempo en actividades sanas para tu mente

A diario tienes que descubrir esas actividades que te hacen bien, que te hacen sentir en confianza y que sabes no te están perjudicando. Comer en tranquilidad, tomar un baño relajante o ejercitarte de una forma agradable; esto te ayudará a encontrar paz interior y será más fácil para ti balancear la familia y el trabajo.

También cuando necesites de un descanso de las obligaciones laborales y familiares; puedes encontrar refugio en las enseñanzas de las Sagradas Escrituras. Unos pocos minutos harán una gran diferencia, créeme.

Deja de gastar tiempo

¿Si colocases un temporizador en tu celular sobre cuántos segundos gastas al día sin hacer nada, cuántos minutos acumularía este? Respondo esta interrogante por ti, probablemente horas. Así que puede que tu problema con no conseguir el equilibrio laboral y personal esté en que desperdicies tiempo que no deberías malgastar.

Distingue entre esas actividades que sean necesarias de las prescindibles; para con ello identificar las tareas del trabajo que tienen prioridad, y esas a las que debes dedicar menos tiempo.

Comienza con pequeñas acciones

Como te lo planteé, los nuevos hábitos serán abrumadores para cualquier, en especial si se realizan con brusquedad y rapidez. Es más simple empezar con lentitud, para que la adaptación sea una mucho más paulatina. No veas a los cambios rápidos como soluciones, porque no lo son.

Ya que estamos a casi nada de entrar en el 2022, propón un cronograma de nuevas rutinas que te ayuden con este propósito. El cambio es posible, puedes organizar cientos de pequeñas metas que le harán bastante bien a tu familia, posición en el trabajo y a ti mismo. Interioriza el concepto de flexibilidad este nuevo año y verás como puedes balancear la familia y el trabajo.

Sé realista, no conformista

A pesar de que este es un deseo popular, no todos los matrimonios tienen la posibilidad de que, aunque sea uno de los padres se quede en casa a cuidar de los niños/as. La economía actual impide esto, algunas veces incluso los trabajos a medio tiempo no son suficientes para pagar todas las facturas.

Este hecho genera una culpa muy marcada en los padres y madres por trabajar tanto. Se sienten acorralados entre lo que deben hacer y lo que quieren hacer. Te recomiendo que no te sientas culpable ante esta realidad; sino que te adaptes a ella con una mentalidad positiva, sana y coherente en Dios.

Es un hecho, esos padres y esas madres que notas pueden equilibrarse, no malgastan su tiempo sintiéndose culpables. Usan su tiempo en ser productivos, asertivos y flexibles. Ser un padre o madre de calidad no implica que tus hijos/hijas estarán satisfechos con tus decisiones a cada rato. Así como que ser un trabajador eficiente implicará que no cuestiones la forma en la que tus asignaciones son dadas.

Está bien pedir ayuda para lograr balancear la familia y el trabajo

Por último, no tiene nada de malo pedir ayuda cuando sepas que es demasiado para ti. Pedir ayuda requiere de humildad, de fortaleza y de sabiduría, aunque seas renuente a aceptarlo del todo. Por ejemplo, si tu hijo/a quiere ir a un evento deportivo pero sus horarios laborales hacen posible que lo puedan llevar con puntualidad, bien puedes pedir ayuda a algún familiar, y unirse luego.

Siempre hay una forma de solucionar las cosas por más complicadas que parezcan; es solo que debes estar despierto/a ante las posibilidades que van desarrollándose ante ti.

Otra forma de incalculable valor es la de buscar ayuda en la terapia familiar o de pareja. Cuando los problemas parezcan ser más abundantes que los buenos momentos, un profesional podrá ayudarte a ver con más claridad.

 

¿Quieres ayuda para balancear tu trabajo con tu familia este año nuevo? Puedes llamar con completa confianza al 407 618 0212.

¿Por qué es necesario balancear nuestro trabajo y la familia?

Desde hace un tiempo quiero hablarles sobre el equilibrio que debemos encontrar entre el trabajo y la familia. Hace unos días, un paciente me estaba hablando de lo complicado que era desligarse de su celular por su trabajo.

Leer un correo electrónico, un mensaje de texto o WhatsApp después de finalizado su horario laboral, no le parecía en el instante un gran problema. Hasta que su esposa le llamó la atención más tarde en su intimidad; porque había preferido contestar estos que escuchar cómo su hijo le hablaba de sus anécdotas de la tarde.

Este no es un escenario extraño en nuestra nueva cotidianidad. La imposibilidad de no saber cómo desconectarse del trabajo, afecta negativamente la calidad de padres o madres que somos. Y es que nuestro deseo por triunfar profesionalmente, o la exigencia que nos imponemos por elevar los ingresos familiares; estas son cargas de las cuales no se puede desentender con facilidad.

¿Por qué balancear el trabajo y la familia?

Sin embargo, te lo digo sin rodeos, sobre todo a tan poco de acabar este año 2021; estar disponible las 24 horas del día para tu trabajo; ya sea por miedo a que te despidan, a no rendir lo suficiente o cualquier otra excusa en la que estés pensado ahora, es nocivo para el bienestar de tu familia.

La escapatoria más evidente es la de encontrar el equilibrio entre tu trabajo y la familia; puesto que es este tipo de equilibrio el que te llevará a una mejor condición física, mental, sentimental y sí, profesional. Pero balancear estas dos partes de tu vida no significará lo mismo para ti, que para otra persona. Te aconsejo que comiences a analizar cómo te sientes con este tema, para interiorizar los cambios que necesitas desde este momento.

El daño en números

Una forma muy fácil y objetiva de percibir los daños que ese desbalance entre el trabajo y la familia provoca en nuestra comunidad cristiana, es analizando diversas estadísticas. Pew Research Center por ejemplo, realizó varias encuestas en dónde se exploraba más de esta problemática.

En una de estas se les preguntaba a los padres trabajadores qué cómo había afectado su carrera el equilibrio entre el trabajo y la familia. De estos un 27% dijo que ser padre o madre trabajador/a les había dificultado avanzar en su oficio o carrera, mientras que un 38% aseguraron que ser padres o madres trabajadores les había dificultado ser buenos roles parentales.

En ambos casos, las mujeres eran más propensas a expresar su descontento. Ellas experimentaban un mayor número de interrupciones en sus carreras profesionales relacionadas con su familia. Incluso su tiempo libre del trabajo solía estar muy invertido a la familia. La reducción de horas de su trabajo para dedicarse a la familia era otro componente muy repetido. Lo cual evidencia una importante brecha de género en esta perspectiva.

Sea cual sea tu caso, quiero darte a conocer cómo los extremos no son buenos desde donde se les observe. Por el contrario, sí ocurre que el equilibrio, organizar mejor los horarios, y priorizar aquellos factores más importantes en la vida, son las respuestas más asertivas que podrás practicar.

¿Cuán importante es encontrar el equilibrio entre el trabajo y la familia?

Mucho. Es muy importante que como padre o madre trabajadores encuentren un punto de equilibrio que sea beneficioso para todos los integrantes de la familia. La familia es el núcleo más sagrado en el mundo, y por lo tanto la desunión no puede existir en esta. “Y, si una familia está dividida contra sí misma, esa familia no puede mantenerse en pie. (Marcos 3:25)”.

Tener una madre que desatiende a sus hijas por su trabajo, o un padre que imita lo mismo, será el origen de cientos de problemas; que solo se agravarán como una bola de nieve. La falta de compromiso por detectar esta clase de disyuntivas generará desconfianzas, tensiones y posibles peleas. Asimismo, el criticarse mutuamente sobre quién ha sacrificado más de su tiempo libre o éxitos profesionales; o hasta quién es el peor padre o la peor madre, no sirve de nada.

Recuerda que un matrimonio está conformado por dos personas que trabajan en equipo para la crianza de sus hijos/as. En un matrimonio no existen “tus errores”, son “nuestros errores”; y se debe trabajar en ellos, llegando así a los acuerdos correctos según las circunstancias vividas.

Además, ten presente que cuando se está cansado, estresado y agotado, eso afectará tanto la calidad del tiempo que pases con tus hijos/as, como con tu esposo/a. También afectará la calidad del trabajo que desarrolles. Todo está conectado entre sí.

Claves para concentrarte en el cambio

Las distintas generaciones han observado desde una visión diferente la relación del trabajo y la familia Puede que tus padres considerasen que la vida laboral era una prioridad; y puede que tú consideres que la vida familiar lo es, pero temes no proveer los suficiente económicamente o no satisfacer tus propias metas profesionales.

El mundo ha evolucionado, los conceptos se han modernizado; y de tu parte queda el cambiar esos pequeños pasos en falsos que estás dando. Estas son algunas claves para encontrar el equilibrio del que te estoy hablando:

Identifica qué importa más en tu vida y encuentra soluciones

Tómate unos minutos u horas en analizar quiénes son las personas más importantes en tu vida y por qué son importantes para ti. En este orden de ideas, la familia quedará en un puesto prioritario. Como padre o madre estás en el deber moral y legal de protegerlos. Supón que tendrían hoy en la noche un maratón de películas, ¿qué pasa si tu jefe quiere que te quedes hasta tarde para terminar un determinado proyecto?

Busca una solución. Una alternativa.

No se trata de resignarte a llegar todas las noches tarde y no poder dar las Buenas Noches o leerle la Biblia a tu pequeño; no obstante, tampoco se trata de no entregar el proyecto a tiempo. Sino de buscar una mejor solución, como llegar más temprano al siguiente día o buscar una alternativa para terminar antes de la fecha límite.

Tu bienestar es una prioridad

Algunas veces deseamos multiplicarnos para ser todo eso que queremos ser en nuestro mundo ideal. Queremos ser padres/madres perfectos, amigos/as incondicionales, trabajadores responsables, miembros de la comunidad colaborativos, etc.

Pero ¿te has detenido un momento a pensar en cómo te sientes tú como ser humano? Trabajar duro a corto plazo y ver esos resultados a corto plazo te dará toda la adrenalina que crees quieres. Aun así, a largo plazo las consecuencias no podrán ser subestimadas en tu salud, tampoco en tu familia.

Detente cuando sientas que es demasiado para ti. Busca soluciones, pero tampoco exageres con tus posibilidades. Tu salud mental es fundamental para ser todo lo que quieras ser de corazón. Si te sientes cansado, solo o hambriento no podrás ser la persona que tanto deseas ser, no funcionamos así.

Reconsidera lo que es normal

Bastante hemos hablado de lo que nosotros podemos hacer por el trabajo y la familia. Pero eso no quiere decir que un sin número de normas tácitas en el mundo laboral son trampas diseñadas para atribuir cargas injustas a los trabajadores.

Cuestiona todo, y encuentra una explicación lógica, legal y justa ante las exigencias que te impone tu trabajo. Los empresarios y jefes en general deben asegurarse de fomentar actitudes saludables en sus ambientes laborales. Millones de estadounidenses no trabajan con garantías de baja familiar remunerada o baja por enfermedad. Algunos trabajadores dejan de disfrutar de algunos días de sus vacaciones. ¿Eso es normal o correcto para ti?

 

¿Estás reconsiderando cómo eres capaz de replantearte estos puntos para este 2022? Si necesitas ayuda u orientación no dudes en llamar al 407 618 0212.