Problemas comunes en el matrimonio: Buena comunicación, mejorando su calidad

Los matrimonios que resuelven con rapidez los malentendidos y no temen hablar del tema que sea, tienen en común una buena comunicación. A través de esta, se fortalece el corazón de quienes conforman la pareja, además de dar la bienvenida en su unión al respeto y la comprensión.

Es la intención de nuestro Señor que nuestros matrimonios sean refugios llenos de confianza y buenos valores. Del tipo de matrimonio en el que exista el amor y una fuerte conexión; uno en el que el compromiso entre esposo y esposa no pueda romperse.

Aun así, fomentar una comunicación sana en el matrimonio tiene sus propios desafíos, los cuales deben superarse.

Deseo entonces que sigas conociendo a continuación cómo eres capaz de mejorar la calidad de la comunicación que tienes con tu esposo/a.

 

¿Cómo mejoro la calidad de una buena comunicación con mi pareja?

Alimentar una buena comunicación es una tarea que necesita empeño y esfuerzo. En especial, requiere muchas pequeñas acciones y palabras, pero es un desafío que valdrá la pena a largo plazo. Una vez que te percates de lo bien que esto hará a tu matrimonio, notarás los resultados.

Deseo darte algunas recomendaciones para este propósito:

Manténganse centrados en el presente

Es tentador sacar a relucir conflictos del pasado que estén relacionados con lo que está pasando en el presente. Te parecerá necesario descargar esas ideas, pero no es lo más apropiado. Hacer eso solo enturbiará la situación y los bloqueará de encontrar una solución con facilidad.

Por lo que, al tener discusiones, no recurran a temas del pasado que generaron heridas, deben concentrarse en el presente1, en qué sienten ahora y tratar de comprender todo ello, encontrar una solución que sea viable. El presente es todo lo que importa y necesitan aceptarlo2.

Escúchense con atención

Habitualmente hay quienes creen que están escuchando a su pareja en las discusiones, pero no lo hacen en realidad, porque en lo que están enfocados es en tener una respuesta astuta para su contraparte. Eso no es escuchar.

Para que la comunicación sea eficiente, ambos miembros de la pareja deben ir en ambas direcciones. Así que, por más complicado que sea, necesitas escuchar de verdad lo que te está diciendo tu esposo/a. No es necesario que interrumpas lo que te tenga que decir.

Pónganse en los zapatos del otro

Un matrimonio necesita ser empático, comprenderse y ponerse en los zapatos del otro con más frecuencia de la que podrías pensar3. Centrarnos solo en nuestros propios deseos, terminará siendo contraproducente. Necesitan tomar el punto de vista de su pareja para entender por qué actúa de cierta manera.

Mira desde el ángulo del otro, y, cuando entiendas lo que siente, podrás explicarte de mejor forma. Cuando ambos sienten que el otro les escucha se sentirán mejor y se comunicarán mejor.

Hazte cargo de tus acciones

Hacerte responsable de tus acciones es una conducta correcta y una muestra de fortaleza personal. Una fortaleza que necesitas mostrar más que nunca dentro de tu matrimonio. La comunicación efectiva es esa que implica admitir que te equivocas.

Cuando ambos compartan la culpa en una situación, necesitan admitirlo. Este tipo de comportamiento suaviza la actitud del otro, y es un ejemplo de madurez. Después de ello, deben encontrar una solución que satisfaga las necesidades de todos.

En caso de tener conflictos tratando de encontrar soluciones dentro de su matrimonio, o si les cuesta resolver conflictos con respeto, y no mejoran, pueden recurrir a sesiones de terapia de pareja. Estas se encuentran diseñadas para mejorar la comunicación dentro de su unión, pero no solo esto, sino para resolver cualquier otro conflicto que consideren que esté afectando su relación y que debe arreglarse.

 

El valor de la buena comunicación matrimonial cristiana: consejos necesarios

Como cristianos, nuestros matrimonios tienen que estar representados por la empatía, fortaleza y respeto hacia nuestra pareja. Debemos ser capaces de comunicarnos con emociones sinceras, amabilidad, y, sobre todo, respetando los códigos establecidos por nuestra fe4.

La Biblia está llena de consejos matrimoniales que pueden aplicarse en tu matrimonio, con la única intención de mejorarle y fortalecerle. Las Sagradas Escrituras son una excelente fuente de apoyo para mejorar la comunicación y su calidad. Estos son algunos principios bíblicos que podemos aplicar para tener una buena comunicación.

Trata a los demás como te gustaría que te trataran a ti

Uno de los principios más poderosos dentro de todo matrimonio está plasmado en las palabras de Mateo 7:12, en donde leemos: “Por lo tanto, todo lo que queráis que los demás hagan por vosotros, haced también vosotros lo mismo por ellos…».

¿Cuál es tu respuesta cuando te gritan o regañan de mala gana? Quizás algunos/as contesten que responden de la misma manera. Pero, expresar enojo o querer herir al otro no son formas sensatas de actuar. Esta clase de errores no pueden cometerse en el matrimonio.

Trata a tu esposo/a como te gustaría que te trataran a ti. Por lo que, si quieres que tu pareja te escuche mientras hablas o quieres que te ayude en las tareas del hogar, necesitas hacer lo mismo por este/a.

Prioricen la oración dentro de su matrimonio

Mantener a la oración en el corazón del matrimonio es también una de las enseñanzas de la Biblia. Específicamente en 1 Tesalonicenses 5:17 se nos dice que «oremos continuamente». La fe es un eje en las familias cristianas y un componente necesario en los matrimonios.

Cuando una pareja ora, lleva sus problemas ante Dios, quien les dará la sabiduría necesaria para llegar a las respuestas indicadas. Él conoce tus sentimientos, pesares y tu corazón.

Practiquen el perdón

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Por su parte, Efesios 4:32 nos dice «Sed bondadosos y compasivos unos con otros, perdonándoos mutuamente, como Dios os perdonó en Cristo».

Un matrimonio no podrá comunicarse bien si ambas partes están enojadas o resentidas. Guardar ira dentro de ustedes es contraproducente. Por eso debes perdonar más a menudo a tu esposo/a. Si sientes que tienes ganas de herirle o descargar tu resentimiento, detente. Lo mejor será hablar con sinceridad y resolver los problemas en cuanto aparezcan.

¿Necesitas más recomendaciones sobre el matrimonio cristiano? Podemos hablar de ello a través del 407 618 0212.