No hay mejor momento para proponerse cumplir metas que el inicio de un nuevo año. Pero ¿las cumples en realidad? Por más complicado que sea admitirlo, es habitual que nos planteemos objetivos con toda la ilusión del mundo. Sin embargo, con el transcurrir de los meses, esas metas se olvidarán y abandonarán, logrando que lo único que nos quede de ellas sea culpa y hasta vergüenza por no ser capaces de alcanzarlas.
Quiero decirte que no eres el único/la única en esta situación, sino que es un escenario repetitivo al que personas comunes, como tú y yo, nos enfrentamos con frecuencia.
Ya sea que quieras pasar más tiempo en familia o aprender un nuevo idioma, en ti está la voluntad para hacerlo. Solo necesitas creer en ti mismo/a y utilizar las herramientas adecuadas para llegar a tu destino.
Por eso quiero hablarte un poco más sobre esos obstáculos que te podrían estar impidiendo alcanzar tus metas. Toma en cuenta que la mayoría de las respuestas están en tu mente, especialmente la respuesta del Sistema de Activación Reticular (RAS), que explicaré más adelante.
1. No has planteado tu meta de forma positiva
El negativismo nunca te ayudará a cumplir metas por más que lo practiques. Por eso, es una pésima idea la de plantearte metas de un modo negativo, como por ejemplo: “Ya no quiero fumar” o “Ya no quiero subir de peso”. En sustitución, deberías plantearte algo positivo como: “Dejaré de fumar” o “Comeré más saludablemente”.
Por naturaleza, nuestra mente es atraída a lo positivo, a las cosas que le resultan placenteras o atractivas. Tienes que darle, por lo tanto, motivos que la incentiven y así poder cumplir metas. Otro error que se comete muy frecuentemente al tratar de cumplir metas es enfocarse en cosas que no se quieren, y todo lo que he mencionado es un buen ejemplo de ello.
Alejarse de un vicio que se tiene no es lo más motivador, por más que sepas que es lo correcto. Entonces, tienes que plantearte con firmeza esta clase de líneas positivas. Sobre todo, buscando la fortaleza necesaria en Nuestro Señor, quien todo lo ve y quien conoce lo complicado que es luchar contra nuestras debilidades.
2. Tu meta es inalcanzable o no es medible
Aunque soñar en grande no es condenable, extralimitarse en las capacidades o límites que todos tenemos de alguna u otra manera, sí lo es. Este es uno de los obstáculos más peligrosos en lo que a no cumplir metas se refiere, porque pecamos por soberbios, y, con ello, el fracaso es el único resultado.
Cuando te plantees una meta, esta debe tener una forma determinada, un tiempo o un alcance que esté bien delimitado. Es algo que te servirá para mantener la dirección correcta. Tus objetivos tienen que ser realistas y sensatos.
3. Te olvidas del proceso para cumplir metas, solo existe el resultado
Cumplir metas es mucho más que celebrar cuando las has alcanzado. Se trata de recompensarte poco a poco con los pequeños pasos que consigas dar al ir avanzando en ellas. Es este el motivo por el que tantos desisten antes de poder festejar.
Sin alegría, pasión o un impulsor, son escasas las situaciones en las que podremos sentirnos satisfechos. Premiarte de vez en cuando, a medio camino, es una sugerencia que te quiero dar.
4. Desconoces el poder detrás de la visualización
Las palabras motivadoras son un gran incentivo, pero, hace falta más que solo escucharlas para que hagan efecto en nosotros. Sucede lo mismo cuando escuchamos las Sagradas Escrituras, por más sentido que estas tengan y por mucho bien que nos hagan, si se tiene un mal concepto o poca fe en estas, no se podrán esperar muchos resultados.
¿Por qué? Porque las palabras tienen gran poder, pero, para hacer provecho de este necesitas interiorizarlas, necesitas emplear la herramienta de la visualización. Con ella, podemos recrear o experimentar mentalmente situaciones que creemos que están aconteciendo en nuestra vida real.
Agregar emociones, texturas, olores y demás experiencias, ayudará a complementar esta herramienta, la cual, al mismo tiempo, servirá para reprogramar nuestro Sistema de Activación Reticular (RAS).
5. No has reprogramado tu Sistema de Activación Reticular (RAS)
Unos pocos párrafos no son suficientes para elogiar las maravillas de una de las más grandes creaciones de Nuestro Señor: la mente humana. Únicamente pensando que en cualquier instante tenemos la capacidad de examinar miles de millones de datos sin entrar en algo parecido a un cortocircuito, es cautivador.
No obstante, hay una razón por la que no entramos en «corto circuito». Y, esta es el sistema de filtrado de información que posee nuestra mente, al cual llamamos Sistema de Activación Reticular (RAS). Este sistema es un conjunto de nervios localizados en el tronco del encéfalo, cuya función es la de depurar la información que crea necesaria para el diario operar, mientras que aquella información que no lo sea, será desechada al no considerarse de utilidad.
¿Por qué quisiera reprogramar mi RAS? ¿O cómo esto podría ayudarme a cumplir metas? Por una simple razón. Puede que por tus propios conceptos, negativismos o enfoques hayas programado a tu cerebro para omitir información de utilidad para el cumplimiento de objetivos.
El RAS es aquello que se activa cuando escuchas en una multitud de voces gritando, tu nombre, o aquello que se activa cuando lees con rapidez un texto muy largo, pero tus ojos detectan la palabra que estás buscando.
Al reprogramar el RAS, podrás hacer ver a tu cerebro lo que estás enfocado en buscar. Así que, entrenarlo, es posible. Aunque, se necesita dedicación para poder mezclar pensamientos subconscientes con los pensamientos conscientes.
Imagina lo mucho que te acercarás a alcanzar tus metas si te concentras tanto en alcanzarlas que tu cerebro, sin necesidad de pensarlo, te revelará pistas de información, personas y oportunidades que están esperando por ti. Algunas veces ni tendrás que intentarlo o esforzarte, solo ocurrirá.
Te invito a leer también nuestro post sobre El Sistema de Activación Reticular y el cumplimiento de metas.
También te invito a que conozcas más obstáculos que podrían impedirte alcanzar tus metas aquí.
¿Deseas conocer más del tema y otras estrategias para reprogramar tu Sistema de Activación Reticular? Puedes obtener más información llamando al 407 618 0212.
